Hay una tendencia mundial hacia un estilo de vida más saludable. Se incorpora la actividad física en la que la gente se involucra, así como los alimentos que consume.An toda granja natural, es una de las mejores maneras de asegurar que usted consume, los alimentos libres de químicos saludable. También tiene sus beneficios financieros. Esto es por qué tantas personas están interesadas en el cultivo de hortalizas orgánicas.
El suelo en el que la comida se plantará juega un papel crucial en su definición como si hubieran sido cultivados orgánicamente. Se debe tener cuidado para asegurar que el terreno seleccionado para la siembra no ha sido contaminado por sustancias químicas nocivas. Esto sucede a menudo a través de derrames de productos químicos industriales y residenciales, así como el dumping. Una vez que la seguridad de la tierra se ha establecido, la atención se puede girar a la preparación para la plantación.
El compostaje se realiza mediante la combinación de materia biodegradable tales como hojas y cáscaras de vegetales y permitiendo que se descompongan antes de aplicar al suelo. También es una buena idea, ya que permite el reciclaje de residuos orgánicos. Esto también tiene beneficios económicos, ya que elimina la necesidad de fertilizantes comerciales y, como tal guarda el agricultor de este gasto.
Todos los agricultores están preocupados por los estragos que las plagas pueden causar en sus fincas. Esto, junto con la economía mundial impulsada comercializada y el consumo ha dado lugar a la popularidad de una gama de productos de control de plagas comerciales. Muchos de estos pesticidas comerciales son, sin embargo, perjudicial para las personas que consumen los alimentos, así como los que se aplican los pesticidas. No tiene que ser de esta manera sin embargo, como la naturaleza ha proporcionado un número de soluciones al problema de control de plagas.
Verduras de cultivo ecológico se mantienen a salvo de las plagas con métodos naturales. Un ejemplo es la ceniza que, al ser extendido por todo el perímetro de la zona de cría, pueden mantener a raya a las babosas. Además el ajo es conocido para repeler una serie de parásitos y peelings así ajo puede ser dispersada entre las plantas para protegerlas. Si la planta de ajo en realidad está incluido en el huerto o la granja, el efecto es más duradero.
El dinero se guarda por el verde que va con los métodos de control de plagas, ya que los agricultores ya no tienen que comprar fertilizantes comerciales. El dinero se guarda también en términos de los costos de atención de la salud ya que el consumo de estos alimentos, ayuda a mantener a raya las enfermedades. Además, los agricultores y trabajadores agrícolas en riesgo su propia salud y seguridad cuando se aplican fertilizantes y plaguicidas químicos cargados. Cuando se evita este riesgo a los trabajadores agrícolas gozan de mejor salud y se evitan las costosas facturas médicas.
La recolección debe hacerse de forma orgánica. Esto significa evitar química en esta etapa con el fin de garantizar que el estado de cultivo ecológico de la cosecha no se vea comprometida. Si, por ejemplo, se necesita la conservación, se deben utilizar medios naturales de que esto se haga. El uso de conservantes químicos, en este punto anularía todo el trabajo puesto en el cultivo de la forma natural.
No se puede negar el valor y la importancia del cultivo de hortalizas orgánicas . El tiempo y esfuerzo que se necesita para establecer y mantener estas prácticas son bien recompensados en el largo plazo. Esto es así no sólo por los costos de producción asociados que se evitan, sino también por la salud y el bienestar de los consumidores y los trabajadores agrícolas se conservan.
El suelo en el que la comida se plantará juega un papel crucial en su definición como si hubieran sido cultivados orgánicamente. Se debe tener cuidado para asegurar que el terreno seleccionado para la siembra no ha sido contaminado por sustancias químicas nocivas. Esto sucede a menudo a través de derrames de productos químicos industriales y residenciales, así como el dumping. Una vez que la seguridad de la tierra se ha establecido, la atención se puede girar a la preparación para la plantación.
El compostaje se realiza mediante la combinación de materia biodegradable tales como hojas y cáscaras de vegetales y permitiendo que se descompongan antes de aplicar al suelo. También es una buena idea, ya que permite el reciclaje de residuos orgánicos. Esto también tiene beneficios económicos, ya que elimina la necesidad de fertilizantes comerciales y, como tal guarda el agricultor de este gasto.
Todos los agricultores están preocupados por los estragos que las plagas pueden causar en sus fincas. Esto, junto con la economía mundial impulsada comercializada y el consumo ha dado lugar a la popularidad de una gama de productos de control de plagas comerciales. Muchos de estos pesticidas comerciales son, sin embargo, perjudicial para las personas que consumen los alimentos, así como los que se aplican los pesticidas. No tiene que ser de esta manera sin embargo, como la naturaleza ha proporcionado un número de soluciones al problema de control de plagas.
Verduras de cultivo ecológico se mantienen a salvo de las plagas con métodos naturales. Un ejemplo es la ceniza que, al ser extendido por todo el perímetro de la zona de cría, pueden mantener a raya a las babosas. Además el ajo es conocido para repeler una serie de parásitos y peelings así ajo puede ser dispersada entre las plantas para protegerlas. Si la planta de ajo en realidad está incluido en el huerto o la granja, el efecto es más duradero.
El dinero se guarda por el verde que va con los métodos de control de plagas, ya que los agricultores ya no tienen que comprar fertilizantes comerciales. El dinero se guarda también en términos de los costos de atención de la salud ya que el consumo de estos alimentos, ayuda a mantener a raya las enfermedades. Además, los agricultores y trabajadores agrícolas en riesgo su propia salud y seguridad cuando se aplican fertilizantes y plaguicidas químicos cargados. Cuando se evita este riesgo a los trabajadores agrícolas gozan de mejor salud y se evitan las costosas facturas médicas.
La recolección debe hacerse de forma orgánica. Esto significa evitar química en esta etapa con el fin de garantizar que el estado de cultivo ecológico de la cosecha no se vea comprometida. Si, por ejemplo, se necesita la conservación, se deben utilizar medios naturales de que esto se haga. El uso de conservantes químicos, en este punto anularía todo el trabajo puesto en el cultivo de la forma natural.
No se puede negar el valor y la importancia del cultivo de hortalizas orgánicas . El tiempo y esfuerzo que se necesita para establecer y mantener estas prácticas son bien recompensados en el largo plazo. Esto es así no sólo por los costos de producción asociados que se evitan, sino también por la salud y el bienestar de los consumidores y los trabajadores agrícolas se conservan.
Sobre el autor:
Usted puede visitar el sitio web www.healthyharvesthouse.com para obtener más información útil sobre la importancia del cultivo de hortalizas orgánicas
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