La apertura de un grifo a voluntad es algo que se da por sentado por la mayoría de personas en los países desarrollados. Sin embargo, sólo en los Estados Unidos, alrededor del quince por ciento de las personas están confiando en los pozos. Los sistemas de abastecimiento público de agua son monitoreados cuidadosamente para asegurarse de que es seguro, pero los pozos privados no son parte de cualquier sistema formal. Los propietarios de pozos de sondeo tienen que asumir la responsabilidad personal para asegurarse de que se llevan a cabo regularmente pruebas de agua de pozo .
Es imperativo que los propietarios de pozos privados tienen la calidad de su agua analizada. En un estudio realizado por la Universidad Estatal de Montana, mostró que casi el cuarenta por ciento de las muestras analizadas contenían bacterias coliformes y la mitad de las muestras tenían niveles de nitrato suficientemente altas como para representar una amenaza grave para la salud a los que beberla. Si los pozos no se prueban los que lo consumen pueden contraer enfermedades graves.
Hay un gran número de contaminantes, incluyendo bacterias y productos químicos, así como agentes biológicos que pueden infectar a un pozo de sondeo. Las pruebas de todos ellos no es viable, ya que es un proceso costoso. Los expertos están de acuerdo, sin embargo, que un análisis estándar debe incluir pruebas para bacterias coliformes y nitratos. Estos contaminantes pueden causar la enfermedad. Las pruebas también se debe hacer para determinar la presencia de sólidos disueltos.
La amenaza de la utilización de productos de la perforación debe ser tomado en serio. Las pruebas han demostrado que hay un número de condiciones graves que se pueden contratar si el uso de productos de pozos contaminados. Esto incluye la disentería, hepatitis e incluso algunos de los trastornos neurológicos más peligrosos. Además, las personas sometidas a tratamientos radicales como la quimioterapia corren un riesgo particular. Las personas vulnerables como los lactantes y los pacientes con SIDA corren un gran riesgo.
Las perforaciones son vulnerables a la contaminación de una amplia variedad de agentes que pueden ser perjudiciales para los seres humanos. Este es especialmente el caso en las zonas donde hay actividad industrial pesada o minas. Si las tuberías de plomo se utilizan también debe ser motivo de preocupación. Incluso las operaciones agrícolas que utilizan pesticidas y otros productos químicos pueden contaminar la tabla de metro, lo que provoca daños a los usuarios de los pozos de sondeo.
Los expertos coinciden en que el contenido del pozo se deben probar al menos una vez al año. Sin embargo, las pruebas más frecuentes o incidentales deberían llevarse a cabo cuando se producen ciertos signos. Si algún usuario se enferma o si se han producido incidentes de inundación puede ser una buena idea tener el pozo probado. Si hay algún cambio en el color o el sabor campanas de alarma también deben sonar.
Hay una serie de lugares que pueden probar los pozos. Los dueños deben tener cuidado, sin embargo. Algunas instalaciones de prueba no son reconocidos y sus resultados son sospechosos. Puede ser mejor usar esas instalaciones conectadas a las autoridades locales oa las instituciones académicas locales. El Internet es una maravillosa fuente de información en este sentido. Asesoramiento y orientación también se puede solicitar de los demás propietarios de pozos.
Un pozo privado deben comprobarse regularmente. La salud y el bienestar de todos los que lo utilizan están en juego. Hay buenas razones por las que el gobierno es tan terminante en la calidad de los sistemas públicos. El agua debe estar limpia y saludable. Si este no es el caso, la enfermedad y peor puede sobrevenir.
Es imperativo que los propietarios de pozos privados tienen la calidad de su agua analizada. En un estudio realizado por la Universidad Estatal de Montana, mostró que casi el cuarenta por ciento de las muestras analizadas contenían bacterias coliformes y la mitad de las muestras tenían niveles de nitrato suficientemente altas como para representar una amenaza grave para la salud a los que beberla. Si los pozos no se prueban los que lo consumen pueden contraer enfermedades graves.
Hay un gran número de contaminantes, incluyendo bacterias y productos químicos, así como agentes biológicos que pueden infectar a un pozo de sondeo. Las pruebas de todos ellos no es viable, ya que es un proceso costoso. Los expertos están de acuerdo, sin embargo, que un análisis estándar debe incluir pruebas para bacterias coliformes y nitratos. Estos contaminantes pueden causar la enfermedad. Las pruebas también se debe hacer para determinar la presencia de sólidos disueltos.
La amenaza de la utilización de productos de la perforación debe ser tomado en serio. Las pruebas han demostrado que hay un número de condiciones graves que se pueden contratar si el uso de productos de pozos contaminados. Esto incluye la disentería, hepatitis e incluso algunos de los trastornos neurológicos más peligrosos. Además, las personas sometidas a tratamientos radicales como la quimioterapia corren un riesgo particular. Las personas vulnerables como los lactantes y los pacientes con SIDA corren un gran riesgo.
Las perforaciones son vulnerables a la contaminación de una amplia variedad de agentes que pueden ser perjudiciales para los seres humanos. Este es especialmente el caso en las zonas donde hay actividad industrial pesada o minas. Si las tuberías de plomo se utilizan también debe ser motivo de preocupación. Incluso las operaciones agrícolas que utilizan pesticidas y otros productos químicos pueden contaminar la tabla de metro, lo que provoca daños a los usuarios de los pozos de sondeo.
Los expertos coinciden en que el contenido del pozo se deben probar al menos una vez al año. Sin embargo, las pruebas más frecuentes o incidentales deberían llevarse a cabo cuando se producen ciertos signos. Si algún usuario se enferma o si se han producido incidentes de inundación puede ser una buena idea tener el pozo probado. Si hay algún cambio en el color o el sabor campanas de alarma también deben sonar.
Hay una serie de lugares que pueden probar los pozos. Los dueños deben tener cuidado, sin embargo. Algunas instalaciones de prueba no son reconocidos y sus resultados son sospechosos. Puede ser mejor usar esas instalaciones conectadas a las autoridades locales oa las instituciones académicas locales. El Internet es una maravillosa fuente de información en este sentido. Asesoramiento y orientación también se puede solicitar de los demás propietarios de pozos.
Un pozo privado deben comprobarse regularmente. La salud y el bienestar de todos los que lo utilizan están en juego. Hay buenas razones por las que el gobierno es tan terminante en la calidad de los sistemas públicos. El agua debe estar limpia y saludable. Si este no es el caso, la enfermedad y peor puede sobrevenir.
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